10 olores que odian los gatos y debes evitar en casa
Los felinos son animales con un sentido del olfato envidiable. Si bien los perros suelen encabezar la lista, los gatos también son muy sensibles a los olores que los rodean.
Por esta razón, algunos aromas pueden afectarlos negativamente o, sencillamente, provocar cierto rechazo en ellos. ¿Sabes cuáles son los olores que odian los gatos y se recomienda evitar?
¿Cuáles son los olores que odian los gatos?
Los gatos al igual que sus humanos sienten predilección por ciertos aromas,
Entre los olores que repelen a los gatos con más frecuencia están aquellos que pueden ser tóxicos o altamente dañinos para su organismo. Pero, ¿cuáles son los olores que odian los gatos en específico?
1. Caja de arena sucia
El arenero es el lugar donde realizan sus necesidades y marcan territorio, de modo que si lo encuentran sucio, probablemente no se acercarán. Lo más habitual es que recurran a la alternativa de orinar o defecar fuera del arenero, tanto en los alrededores como en algún rincón en el que se sientan seguros. Y es que no es una novedad que los gatos son extremadamente limpios con su higiene.
2. Olores cítricos
Los cítricos son otros de los olores que ahuyentan a los gatos: la naranja y el limón son tan sólo algunos de estos ejemplos. Es más en el mercado es posible encontrar repelentes para gatos a base de estos aromas.
De modo que si quieres evitar que tu gato se acerque a tu jardín o a tus plantas, una opción es pulverizar naranja o limón rebajado en agua, o esparcir cáscaras de frutas cítricas.
3. Condimentos
Algunos condimentos repelen con mucha eficacia a los gatos, pues los olores picantes y amargos pueden ser muy tóxicos y molestos para su olfato. El aroma de la pimienta, la mostaza y el curry son algunos de esos olores que odian los gatos.
De hecho, la pimienta ha sido usada tradicionalmente para evitar que los gatos orinen en las esquinas o se limen las uñas en las esquinas de los sillones.
4. Aceites esenciales intensos
La mayor parte de los gatos rechazan olores como el árbol de té, la menta y el eucalipto, entre otros muchos. Además, algunos de estos aceites esenciales son potencialmente peligrosos para los felinos, especialmente si se aplican sobre la piel o los toman. De modo que si quieres aplicar aromaterapia a tu gato o animal, conviene consultar con un experto.
5. Otros gatos (¡y perros!)
Entre las características más destacables de los gatos está la territorialidad. Por ello, si regresas a casa tras pasar un día por Barcelona y en tu paseo has acariciado a otro felino, probablemente tu gato se lanzará a oler tu cuerpo para identificar el olor del otro animal. Si, planeas introducir un nuevo gato en la familia, debes saber que llevará su tiempo y, sobre todo, algún que otro enfado por parte del gato de la casa.
6. Pescado en mal estado
Humanos y felinos coinciden cuando se trata de pescado en mal estado, pues el instinto los alerta de un peligro potencial para el sistema digestivo (y supervivencia, claro está).
7. Algunas frutas, como el plátano
No cabe duda de que cada gato es un mundo y que cada uno de ellos presume de tener sus propios gustos y personalidad, pero la cáscara de plátano parece ser efectiva para que tu gato no se acerque allí donde no deseas que lo haga. Para ello, frota la parte externa del plátano y deja “reposar” por un dí
8. Productos químicos
Los olores intensos que proceden de productos químicos pueden ahuyentar a los gatos, de modo que hay que tener especial atención durante su aplicación. Las cremas descontracturantes, el pegamento líquido y determinados productos de limpieza pueden ser muy tóxicos para el olfato de tu felino, de modo que cuando necesites recurrir a alguno de estos, resulta conveniente aislar por una hora a tu gato.
9. Plantas
Más allá de los olores que odian los gatos, existen plantas y flores tóxicas para ellos. Si bien los felinos suelen amar el aroma de la tierra mojada, la textura de las flores y la frondosidad de las plantas, lo cierto es que muchas de las que decoran los hogares humanos son dañinas para su sistema digestivo. Recurre al tomillo y al limón si necesitas de fragancias que no dañen su organismo en caso de ingesta y lo alejen del lugar al que no quieres que se acerque.
10. Ajo
En grandes cantidades, el ajo puede llegar a ser tóxico para gatos y perros. Sin embargo, en pequeñas dosis puede funcionar como vermífugo o anti-desparasitario. Sea como sea, y más allá de sus propiedades protectoras, lo cierto es que el ajo suele provocar cierto rechazo en los felinos. Al ajo se suma la cebolla y el vinagre.
Los felinos son animales muy sensitivos que interpretan estímulos con cada ápice de su cuerpo. De hecho, se estima que su percepción es ¡14 veces mayor que la de los seres humanos!
En este sentido, el olfato es una importante fuente de información, de modo que una vez aclarados los olores que odian los gatos.
¿Qué olor no soportan los gatos que tienes en casa?
¿Alguno de ellos disfruta con alguno de los aromas que la mayoría de los felinos odia?
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